[fusion_builder_container hundred_percent=»yes» overflow=»visible»][fusion_builder_row][fusion_builder_column type=»1_1″ background_position=»left top» background_color=»» border_size=»» border_color=»» border_style=»solid» spacing=»yes» background_image=»» background_repeat=»no-repeat» padding=»» margin_top=»0px» margin_bottom=»0px» class=»» id=»» animation_type=»» animation_speed=»0.3″ animation_direction=»left» hide_on_mobile=»no» center_content=»no» min_height=»none»][fusion_text]En los últimos tiempos, hemos oído hablar de los “factores de crecimiento” como la auténtica revolución de la medicina regenerativa, sobre todo en la medicina deportiva, porque gracias a su capacidad de regenerar tejidos musculares ha evitado tener que operar a estrellas del deporte como Rafa Nadal o Xavi Hernández.
La creciente conciencia estética hace que haya aumentado el interés por desarrollar productos que nos ayuden a mejorar la apariencia de nuestra piel , y la aplicación del plasma rico en factores de crecimiento (Endoret PRGF) se está consolidando como uno de los tratamientos antiaging más demandados hoy en día.
La tecnología endoret PRGF, en aplicación dermoestética, tiene la capacidad de restaurar la vitalidad de la piel al aumentar su hidratación y desencadenar una serie de efectos biológicos claves en la reparación y regeneración de los tejidos. El resultado del tratamiento es una piel sana, más hidratada y más luminosa, adquiriendo un aspecto más joven que perdura en el tiempo.
Es un tratamiento que se puede aplicar a partir de los 35 años, a nivel preventivo, para ralentizar el proceso de envejecimiento y a partir de los 45 años con fines regenerativos y correctivos.
¿Cómo se obtiene?
Un proceso que no es complicado. Para obtener el plasma rico en plaquetas se extrae una pequeña cantidad de sangre del paciente que se centrifuga a continuación con el fin de conseguir una parte elevada de concentración de factores de crecimiento, de gran poder revitalizador. Esta parte será la que se infiltre a continuación con unas microagujas en las zonas que se desee bioestimular.
¿Cómo se aplica?
Antes de cada sesión de PRGF es necesario efectuar una limpieza de la zona a tratar, y para evitar las molestias, se aplica una pomada anestésica. A continuación, se inyecta el plasma rico en factores de crecimiento en la piel de cara, cuello, escote y dorso de las manos.
Al infiltrar nuestras propias proteínas, que no van a producir ningún tipo de rechazo en el paciente, se consigue que nuestras células produzcan de forma natural ácido hialurónico y sinteticen colágeno, mejorando la hidratación de la piel y la vascularización de la dermis. Las arrugas no van a desaparecer, sino que van a atenuarse. Pero lo más importante es que vamos a conseguir un resultado muy natural, sin cambiar la expresión de la cara.
El número de sesiones y la periocidad dependerá del grado de envejecimiento de la piel, pero normalmente se recomiendan 3 sesiones, una al mes durante los tres primeros meses, y una de mantenimiento cada seis meses.
¿Cuáles son los resultados?
Los resultados comienzan a apreciarse a las 24 horas, son progresivos, y con cada sesión se evidencia más la atenuación de arrugas y el aumento de la tersura de la piel.
La técnica va a ser eficaz a cualquier edad, pero lógicamente ayudara si tenemos una piel cuidada y evitamos una foto exposición excesiva. El tabaco, por ejemplo, influye ya que normalmente la piel de los fumadores suele estar menos hidratada y oxigenada.
Una vez que hemos conseguido estimular de manera eficaz los tejidos con las 3-4 sesiones del primer año, los resultados se mantienen durante 6-9 meses.
Si deseas probar nuestro tratamiento de rejuvenecimiento facial con plasma, solo tienes que pedirnos una cita, y podrás comprobar los resultados por ti mism@.[/fusion_text][/fusion_builder_column][/fusion_builder_row][/fusion_builder_container]